miércoles, 15 de mayo de 2013

1. El principio.



Algunos ya sabéis que había escrito una historia, y como estaba con ganas de empezarla eso he estado haciendo estos días. Quizás sea aburrida, no lo sé... a mi me gusta, y aquí os dejo con ella. ¡Espero que no sea un coñazo! Bienvenidos a "Como la vida misma".



Capítulo 1: El principio.

Esta historia empieza con Melanie.




Melanie tiene 15 años, vive con sus padres, Ernesto y Alba, y su hermano George. George es algo mayor que Melanie, pero por muy poco, habían venido a la familia con apenas cuatro años de diferencia. Viven en el barrio de Los Manantiales, en la zona más prestigiosa. Ernesto y Alba son dueños del restaurante de lujo de la ciudad y ganan mucho dinero.

Hace un par de años que viven en el barro de Los Manantiales, y Melanie lo había pasado bastante mal por haber cambiado de instituto. Antes tenía amigas a las que quería como si fueran hermanas, pero la distancia había hecho que se alejaran. Al crecer, habían cambiado sus gustos y sólo tenían en común que habían crecido juntas.



Ahora, Melanie tenía nuevas amigas, Amelia y Sarah. Ellas hablaban en inglés, no sabían apenas español, y Melanie se comunicaba con ellas en inglés por que por suerte había ido a un colegio bilingüe.



Melanie, Amelia y Sarah eran las chicas malas de su clase. A pesar de tener sólo 15 años, bebían, fumaban y salían de fiesta a escondidas de los mayores. Melanie ocultaba muy bien lo que hacía cuando salía de fiesta con sus amigas anglosajonas.



Al principio, Melanie se escandalizó cuando vió que sus nuevas amigas fumaban y bebían, sus padres le habían enseñado desde pequeña que eso es fatal para la salud... pero claro, las influencias a esa edad calan hondo, y acabó probándolo. Y enganchándose.

Los padres de Melanie no sabían lo que pasaba por que trabajaban desde la tarde hasta la madrugada en el restaurante, y no podían controlar lo que pasaba con sus hijos. Ellos confiaban en que serían responsables.




Un día, Melanie volvía de una fiesta a casa, y se olvidó de devolver el paquete de tabaco a Amelia. Al llegar a casa dejó el bolso en la entrada, como siempre, y se fue a dormir antes de que llegasen sus padres de trabajar. George ya había llegado, él también salía y bebía, pero no fumaba. George es deportista y juega al fútbol, así que odia el tabaco.




Más tarde, esa misma noche, cuando los padres de Melanie llegaron, notaron un olor extraño en la entrada. Alba decidió mirar el bolso de Melanie, y decubrió...

Alba: -Ernesto, dios mío... ¡nuestra hija Melanie fuma!



Alba fue enfurecida a la habitación de Melanie, y la despertó a gritos.

Alba: -Despierta Melanie, ¡despierta!

Melanie se despertó asustadísima. Estaba de lo más tranquila, por fin había dejado de darle vueltas la habitación y las náuseas se le habían pasado, y de repente van y la despiertan.

Melanie: -¿Qué pasa mami?
Alba: -¿Se puede saber qué es esto? *le enseña la caja de tabaco*
Melanie tragó sonoramente, y respondió sin saber qué decir: -Ehm... es de Amelia, se lo he guardado, no quiere que sus padres lo sepan.

Alba le cogió la mano a Melanie y se la olió: -Estas manos huelen a que has estado fumando, no me mientas, yo también fui joven.
Melanie: -Mamá, ¿por qué has hecho eso? Deberías confiar en mí.
Alba: -Si me hubieses contestado la verdad no me hubiese enfadado tanto, prefiero que me lo confieses a que me digas una mentira a la cara.

Melanie no supo qué contestar.

Alba: -No sé que te pasa, desde que vinimos a esta ciudad estás cambiando demasiado, y tus amigas no me gustan, hace unas semanas las vimos intentando comprar alcohol en la tienda de la esquina. Ahora me voy a dormir y mañana decidiremos qué pasará contigo. Y por cierto, los padres de tu amiga Amelia van a enterarse de todo esto, me aseguraré de ello.

Melanie estaba aún bajo los efectos de las 6 copas que había bebido esa noche y no tenía fuerzas para hablar. Se tumbó y se durmió.
A la mañana siguiente, Amelia se despertó con un dolor de cabeza horrible. Y el dolor aumentó cuando recordó que su madre la había pillado con lo del tabaco.



Desde su habitación, Amelia olía que su madre ya había preparado el almuerzo. Tenía miedo de enfrentarse a lo que le esperaba, pero en ese momento, su tripa rugió pidiendo alimento. Se armó de valor, y fue a la cocina.



Alba: -Buenos días. Te has levantado tarde.
Melanie: -Llevo una semana de examenes bastante dura, estaba cansada mentalmente.
Alba: -Bueno, creo recordar que el alcohol causa muchas cosas, como por ejemplo, levantarse tarde.
Melanie se quedó muda mirando a su madre y no dijo nada.
Alba: -Tu padre y tu hermano ya han comido, pero yo he decidido esperar para comer contigo.
Melanie iba a contestarle, pero Alba se adelantó: -Hija, sé lo que es ser joven, tener amigas que fuman y beben, yo también fui joven e hice locuras.
Melanie: -Que sepas que no me he olvidado ni un segundo de lo malo que es fumar y beber.
Alba: -¿Entonces por qué lo haces? No tienes que demostrarle nada a nadie, y si necesitas hacerlo para que tus amigas te acepten, no son tus amigas. Un verdadero amigo te diría "no lo pruebes, yo lo probé y me enganché".
Melanie: -Lo siento mamá...
Alba: -Quiero creer que sí. Esta mañana he estado en casa de Amelia y Sarah, he hablado con los padres de las dos. Se pusieron bastante enfadados, demasiado diría yo. Ya sabes que son de fuera y no hablan mucho nuestro idioma, así que no sé muy bien que gritaban a sus hijas cuando me vine a casa. En cuanto les dije lo que pasaba dejaron de intentar hablar en español y empezaron a gritar en inglés.
Melanie: -Mamá, no me jodas... la has cagado seguro.
Alba: -No soy una amiga tuya para que me hables así, soy tu madre y debes respetarme, ¿qué pasa con tu educación?



Melanie no contestó, fue a su habitación y se conectó al Skype para hablar con Amelia y Sarah.

Melanie: -Chicas, sé lo que ha hecho mi madre y lo siento mucho.
Sarah: -Tía, me van a mandar a casa de mi abuela para que la ayude en casa y de paso terminar de estudiar allí. Vive en Bath. BATH. Es un pueblucho lleno de catetos.
Amelia: -Me cago en todo, a mi me dejan quedarme, pero me meten a un internado.
Melanie: -¿QUÉ?
Sarah: -Que mi madre es super estricta joder, es una perfeccionista y está que echa chispas. Tu madre me ha jodido Melanie, me ha jodido mucho.
Amelia: -A mi no me hace puta gracia todo esto, Mel. Por culpa de tu madre nos hemos metido en un lío.
Melanie: -Por más que me disculpe no servirá de nada...
Sarah: -Desde luego, a mi olvídame desde este momento.
Sarah se ha desconectado.
Melanie: -Espera Sarah, no fue apropósito, ¡mi madre me miró el bolso!
Amelia: -A mi sí que me has jodido, no voy a poder tener vida social en ese puto internado. Paso de tu culo. Que te jodan.
Amelia se ha desconectado.




Melanie se quedó mirando a la pantalla sin saber cómo reaccionar. Y cuando fue consciente, lloró hasta que se quedó dormida.

martes, 14 de mayo de 2013

Seis meses de ausencia

Buenas, como siempre estoy disculpándome por estar ausente, dejaré de hacerlo por que al final no me creeréis, jajaja.

He estado algo ausente estos meses, no por nada en especial, he seguido con el juego, pero ya no juego mucho, me dedico a hacer historias (vaya cosa... ahora me da por hacerme escritora). Soy una friki xD

Mi primera historia en Los Sims 3 se llama Como la vida misma, y esta es la portada de presentación:


Estoy pensando en empezar a subirla aquí, aunque me gustaría subirla a una página aparte, así que ya veré como lo hago. De momento, os digo que voy por el capítulo 24, y espero que como mucho me dure 10 capítulos más.