domingo, 27 de julio de 2014

14. Primer día en el campus.

Melanie y George se fueron de casa de madrugada. La ciudad del campus quedaba a unas cuatro horas en coche de donde vivían y querían llegar temprano para acomodarse cuanto antes. Ernesto, el padre, se quedó dormido, y Alba salió fuera a despedirse de sus hijos. George estaba contento y se despidió con una sonrisa en la cara, pero Melanie no pudo contener las lágrimas. Sabía que en unos meses volvería por las vacaciones de navidad a casa, pero se hacía duro ver cómo se iba haciendo mayor a pasos tan grandes. ¡Ya se iba a la universidad! A Melanie le pareció que hacía solo unos días se habían mudado a esa casa.



Melanie y George llegaron a las ocho y media de la mañana al campus. Se quedaron maravillados de ver las calles llenas de camiones de mudanza, y desde el camión vieron por encima la zona.

George y Amanda, junto a Melanie y Mike consiguieron un par de adosados, así que les vino de perlas. Vivirían pegados, pero no juntos. Prue se buscó un micro piso para ella sola, no fuera a ser que se divirtiera, y Stephan acabó en la fraternidad de los deportistas.




La casa de George y la de Melanie era similar, pero la decoraron de distinta manera.



Era ya mediodía cuando por fin terminaron de poner a su gusto el lugar. Y no había quedado nada mal. Mike pidió una pizza y se sentaron delante del televisor.

Melanie: -¡Empieza la mala vida! - y le dio un mordisco a su porción.
Mike: -No te preocupes por tu figura que haremos ejercicio moderadamente. - en seguida, Melanie comprendió a que se refería y se atragantó. - Me olvidé de traer algo de beber, toma que te me mueres. - le dio un trago largo a la bebida y le dio las gracias.




Melanie y Mike estaban disfrutando de una sesión de peli y pizza, cuando llegó Prue.

Prue: -¡Pero bueno! ¡Que hay reunión de bienvenida en media hora! ¡Venga moveos!
Melanie: -Si estás así hoy no quiero verte el día de los examenes finales...
Mike: -Yo tampoco eh, jajaja.



Llegaron al edificio en el que se realizaría la presentación, y ya habían llegado algunas personas. En la entrada ofrecían regalos de bienvenida gratis, y cogieron de todo.



Después algunos profesores dieron charlas e informaron de cómo era el sistema, dónde conseguir los horarios de las distintas carreras y cómo iba el asunto de los créditos.



En la sala de la charla, se encontraron a Stephan. Al parecer se había cortado el pelo y volvía a ser un poco como antes. Pero seguí por alli Leticia...



Media hora más tarde, estaban en la sala de arriba, que tenía varias cosas para entretenerse. Melanie, Prue y Mike jugaban al futbolín.

Prue: -Hoy es mi último día desperdiciando valiosas horas en las que podría estudiar, así que aprovechad.
Melanie: -Capaz...
Mike: -Ya deberías conocerla, Mel.
Melanie: -Tienes razón, no sé por qué pregunto.
Prue: -Estoy aquí, y os oigo. Ni que fuera malo estudiar.
Mike: -No, pero tampoco es malo pasar un buen rato. Conocer chicos, ya sabes, esas cosas.
Melanie: -Ni a patadas conseguiremos que encuentre un chico que le llame la atención. Quizás algún profe, ¿eh Prue? No sé... sería como estudiar cuando quedaras con él.
Prue: -¡Qué dices! ¡Eso no está bien! - todos se rieron de la cara espantada de Prue, y siguieron jugando hasta que se hizo de noche.



Prue se despidió y se fue en bici. Melanie y Mike, por suerte, vivían a una calle del centro universitario, así que fueron paseando hasta casa. Cuando llegaron, recogieron la caja de la pizza, y mientras Mike se duchaba, Melanie ordenó su ropa.

Mike: -Ya puedes pasar tú. Espero que el agua caliente no sea limitada...
Melanie: -No pasa nada, si sale fría no me moriré, aún hace calor.



Melanie cogió sus cosas y se metió al baño. Al entrar, se apoyó en la puerta y se puso a pensar que al salir, se metería en la misma cama que Mike.

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